viernes, 30 de septiembre de 2016

Respuestas

Si tuvieran la oportunidad de hablar con este gran personaje de la
historia, ¿qué le preguntarían? Estas son 24 respuestas que Ghandi le
dio a la vida, y sin duda aportarán mucho en la de cada uno de
nosotros:1.- ¿Cual es el día mas bello?
R. Hoy.
2.- ¿La cosa Mas fácil?
R. Equivocarse.
3.- ¿El obstáculo mas grande?
R. El Miedo.
4.- ¿El mayor error?
R. Abandonarse.
5.- ¿La raíz de todos los males?
R. El Egoísmo.
6.- ¿La distracción mas bella?
R. El Trabajo.
7.- ¿La peor derrota?
R. El Desaliento.
8.- ¿Los mejores Profesores?
R. Los Niños.
9.- ¿La primera necesidad?
R. Comunicarse.
10.- ¿Lo que hace mas feliz?
R. Ser útil a los demás.
11.- ¿El Misterio mas grande?
R. La Muerte.
12.- ¿El peor defecto?
R. El Mal Humor.
13.- ¿La Persona mas peligrosa?
R. La Mentirosa.
14.- ¿El Sentimiento mas ruin?
R. La Envidia.
15.- ¿El regalo mas bello?
R. El Perdón.
16.- ¿Lo mas imprescindible?
R. El Hogar.
17.- ¿La Ruta mas rápida?
R. El Camino Recto.
18.- ¿La Sensación mas grande?
R. La Paz Interior.
19.- ¿El resguardo mas eficaz?
R. El Optimismo.
20.- ¿La mayor satisfacción?
R. El Deber cumplido.
21.- ¿La Fuerza mas potente?
R. La Fe.
22.-¿Las Personas mas necesarias?
R. Los Padres.
23.- ¿La Cosa mas bella de la vida?
R. El Amor.
24. ¿El mejor refugio?
R. Dios

HERMOSAS FRASES SOBRE EL AMOR



El amor inspira siempre lo mejor de las personas pero como a veces ese
sentimiento da paso a otros muy distintos de odio, rencor o
humillación, nunca viene mal tener a mano algunas frases que te
recuerden por qué deseas volver a enamorarte:

.- El encuentro de dos personalidades es como el contacto de dos
sustancias químicas: si hay alguna reacción, ambas se transforman
(Carl Jung).-

Soy egoísta, impaciente y un poco insegura. Cometo errores, estoy
fuera de control y a veces soy difícil de manejar. Pero si no puedes
manejar lo peor de mí, entonces seguro que no me mereces en mi mejor
momento (Marilyn Monroe)

.- El amor hace que tu alma salga del lugar en el que está escondida
(Zora Neale Hursto)-

Amar profundamente en una dirección nos hace amar más en todas las
demás (Anne-Sophie Swetchine).
- Reírse a menudo y amar mucho… apreciar la belleza, encontrar lo
mejor en los otros, entregarse uno mismo… esto es tener éxito (Ralph
Waldo Emerson).
- Amar a una persona es aprender la canción que hay en su corazón y
cantársela cuando la ha olvidado (anónimo).- La mente determina lo que
es posible. El corazón la sobrepasa (Pilar Colinta).
- El amor es todo lo bueno que parece ser. Por eso la gente es tan
cínica sobre él. Realmente vale la pena luchar por él, arriesgando
todo por él. Y el problema es que si no arriesgas todo, arriesgas aún
más (Erica Jong)

.- Donde hay amor ninguna habitación es demasiado pequeña (Talmud).

- Para cada belleza hay, en algún aparte, un ojo que la ve. Para cada
verdad hay, en alguna parte, un oído que la escucha. Para cada amor
hay, en alguna parte, un corazón para recibirlo (Ivan Panin).

- Hay tres cosas que no se pueden ocultar: la tos, la pobreza y el
amor (proverbio yiddish)

.- El amor ve las rosas sin espinas (proverbio alemán).- Sabes que
estás enamorado cuando no puedes dormirte porque la realidad es
finalmente mejor que tus sueños (Dr. Seuss).

- Un amigo es alguien que lo sabe todo de ti y aún así te quiere
(Elbert Hubbard).

- Es mejor que te odien por lo que eres a que te amen por lo que no
eres (André Gide, Autum leaves).-

 Si juzgas a las personas no tienes tiempo para amarlas (Madre
Teresa).- Ser profundamente amado por alguien te da fuerza, mientras
que amar profundamente a alguien te da coraje (Lao Tzu).-

Tu tarea no es buscar el amor, sino buscar y encontrar todas las
barreras dentro de ti que has construido contra él (Rumi).

- Ama la vida y la vida te amará. Ama a la gente y ellos te amarán
(Arthur Rubinstein)

- El amor verdadero no viene a ti, tiene que estar dentro de ti (Julia Roberts)

- Algunas personas entran en nuestras vidas, dejan su huella en
nuestros corazones y ya nunca somos los mismos (anónimo).

- Quizás los sentimientos que experimentamos cuando estamos enamorados
representan un estado normal. Estar enamorado muestra a una persona
quien debería ser (Anton Chejov).-

El que sigue el camino del amor camina mil metros como si fueran uno
(proverbio japonés).

- El amor entiende todos los idiomas (proverbio rumano).

- El amor hace posible lo imposible (proverbio indio).- Amar
profundamente en una dirección nos hace amar más en todas las demás
direcciones (Anne-Sophie Swetchine).

- El encuentro entre dos personalidades es como el contacto de dos
sustancias químicas: si hay alguna reacción, ambas se transforman
(Carl Jung)

FUENTE. www.motivacionabout.com

miércoles, 28 de septiembre de 2016

SON DE NEGROS EN CUBA


SON DE NEGROS EN CUBA

Cuando llegue la luna llena
iré a Santiago de Cuba,
iré a Santiago,
en un coche de agua negra.
Iré a Santiago.
Cantarán los techos de palmera.
Iré a Santiago.
Cuando la palma quiere ser cigüefla,
iré a Santiago.
Y cuando quiere ser medusa el plátano,
iré a Santiago.
Iré a Santiago
con la rubia cabeza de Fonseca.
Iré a Santiago.
Y con la rosa de Romeo y Julieta
iré a Santiago.
¡Oh Cuba! ¡Oh ritmo de semillas secas!
Iré a Santiago.
¡Oh cintura caliente y gota de madera!
Iré a Santiago.
¡Arpa de troncos vivos, caimán, flor de tabaco!
Iré a Santiago.
Siempre he dicho que yo iría a Santiago
en un coche de agua negra.
Iré a Santiago.
Brisa y alcohol en las ruedas,
iré a Santiago.
Mi coral en la tiniebla,
iré a Santiago.
El mar ahogado en la arena,
iré a Santiago,
calor blanco, fruta muerta,
iré a Santiago.
¡Oh bovino frescor de calaveras!
¡Oh Cuba! ¡Oh curva de suspiro y barro!
Iré a Santiago.
Federico García Lorca


http://www.poemas-del-alma.com/

APRENDER DE NUESTROS ERRORES



Los errores son¡Error! Una palabra que tiene un significado negativo,
normalmente. Indica que hemos hecho algo malo, que nos hemos
equivocado, que no hemos hecho bien, etc.Pero la alarma de error,
salta antes de que ya no podamos hacer nada. Es un aviso que nos
indica que algo no hemos hecho bien y que tenemos que repararlo. Así
que podemos darle a la palabra error un significado diferente, una
oportunidad. Es la ocasión para corregir, mejorar y perfeccionar
aquello en donde hemos cometido el fallo. En algunas culturas se le da
mucha importancia a los errores y la forma en como las personas los
gestionamos. De la actitud que estas adopten sobre ellos, dependerá en
como estos, (los problemas) influyan en nuestro futuro.Cuantas veces
no nos hemos equivocado haciendo cosas tan sencillas y cotidianas como
una receta. Pero nos gustaba tanto, que a base de repetirla muchas
veces, la habíamos conseguido e incluso la habíamos perfeccionado o
habíamos sacado otras versiones. Pues así debe ser con el resto de las
cosas que hacemos en nuestra vida.También podemos encontrar algunas
culturas o actitudes sociales, donde los errores son castigados
inmediatamente. Descartando la oportunidad de ser corregidos o de
evaluar el motivo de el fallo.El castigo no solo frustra, impide que
las personas o el grupo avance, creando un temor que les obliga a
tapar un error con otro horror. Haciendo una cadena de situaciones
catastróficas que llevaran a resultados mediocres y limitadores.
Mientras que aquellos que tienen la oportunidad de reparar sus
errores, se les obliga a sacar lo mejor de sí mismos.No debemos
olvidar que por nuestra condición de seres humanos, los errores están
y estarán a la orden del día. Es una expresión o acto que no vamos a
poder evitar y que no debemos evitar. Pues es de los errores de donde
más aprendemos.Nos obliga a sacar lo mejor de nosotros mismos, a
escudriñar en nuestro interior para que resurjan nuestras verdaderas
capacidades.Por supuesto que en algunas ocasiones nos vemos
influenciados por la sociedad, por nuestro entorno familiar, quizá
nuestros amigos. Pero somos nosotros quienes tenemos el mando de
nuestro barco, y es nuestro rumbo el que tenemos que seguir no el que
nos dicten los demás. Acaso ¿no aprenderemos de haber atracado en el
lugar equivocado? ¿No descubriremos puertos maravillosos donde antes
nadie había llegado?Démosle un significado diferente a la palabra
ERROR. Veámosla como una alarma, que salta indicándonos que hemos
cometido un fallo y que tenemos que corregirlo.Por supuesto sin llegar
a la vaga actitud de cometer siempre errores porque es un acto humano
o cualquier otra excusa. No sería bueno caer en la mediocridad o el
conformismo.Tenemos dos caminos el de aprender de nuestros errores
para sacar lo mejor de nosotros mismos o el de impedirnos la
oportunidad de sacar nuestra mejor versión. La segunda opción nos
traerá consecuencias a largo plazo que no gustan a nadie.¡Ojo! que los
errores cometidos por nosotros no son resultado ni del exterior, ni de
la suerte, ni de los demás. Debemos responsabilizarnos de ellos. Sería
el primer paso, apropiarnos de ellos y acogerlos, para desmenuzarlos
encontrando el lugar donde cometimos el fallo. Es la mejor forma de
conocernos y desarrollar nuestras capacidades Engañarnos a nosotros
mismos no solo es un error sino una actitud irresponsable contra
nuestra propia integridad.Por cierto escribiendo el texto me saltaron
varios errores de caligrafía, salto el rojo de error y pude
corregirlos. Posiblemente allá cometido más errores en el texto. Tal
vez salten otras alarmas. Espero poderlas corregir.

Fuente:WWW.WOMENALIA.COM

COMO CONECTAR CON TU YO INTERIOR



Todos hemos escuchado acerca de los beneficios de la meditación.
Algunos lo practican y otros pasan de largo dudando de los beneficios
de tan sencilla práctica. Es tan sencilla que quizá por ello se le
atribuye el favor de la duda. En ocasiones sin comprobarlo.
La meditación no solo es la acción de sentarse en un lugar vacio y
desconectar con el exterior, que es lo ideal. El objetivo de esta es
práctica es conseguir un estado de paz y armonía con nosotros mismos y
con nuestro entorno. Recuperar el control y continuar con nuestra vida
cotidiana de la forma más sana posible. Independientemente de los
acontecimientos exteriores.          Algo muy parecido ocurre cuando
estamos haciendo algo que nos gusta mucho, una actividad que nos saca
de nuestra rutina y nos introduce en un estado de disfrute, donde
actuamos conscientes de cada movimiento que estamos haciendo,
abandonando cualquier otra distracción. Por ejemplo cuando estamos
cocinando, cuando estamos leyendo, cuando estamos caminando por la
playa con los pies desnudos.          Estamos tan relajados, nuestro
cuerpo esta tan compenetrado con lo que estamos haciendo, que podemos
conectar con  nuestros sentimientos, con nuestros instintos. Incluso
podemos recuperar situaciones agradables que se habían perdido en el
tiempo, robándonos una sonrisa. Es una acción natural del ser humano,
conectar consigo mismo y con la naturaleza. Que hemos ido perdiendo a
medida que nos hacemos adultos. Y que podemos recuperar cuando
queramos.Cuando quieras encontrar tu esencia, cuando quieras saber las
respuestas, cuando quieras escapar; aléjate a un lugar tranquilo,
fresco, limpio, donde puedas relajarte un par de minutos, cinco, tal
vez veinte. Toda una tarde.Relaja tu cuerpo, respira suavemente hasta
que te sientas cómoda (importante),  abre los ojos para mirar las
nubes o ciérralos para crear el espacio donde te gustaría estar en ese
momento. No pienses, no recuerdes, no interrumpas, solo deja que tu
ser fluya.Cuando alcances esa paz donde el exterior no existe en ti.
Es en ese momento donde tu "yo", es poderoso, genuino.Escúchalo y deja
que te guie, conecta con el universo para que este confabule a tu
favor.Es tú ser quien tiene todas tus respuestas..

Fuente:  www.womenalia.com

IMPORTANCIA DE LA EDAD



?Que si la edad importa? por supuesto. Para depende, que cosas es
relevante. No debemos pretender que una persona de 80 años pueda
romper el  record en una maratón. O que una de 20 compita en
experiencia con sus mayores. Aunque siempre está la excepción que
rompe la regla, afortunadamente.Lo que no es posible es que sigamos
pensando que estamos limitados por la edad. La edad es solo el  tiempo
transcurrido en nuestro haber.  No es una constante que nos obliga a
actuar de una manera determinada. Actuamos en consecuencia a nuestra
educación, cultura, etc., y demás factores que han influenciado en
nuestra forma de ser y hacer, a lo largo de nuestra vida.En varias
ocasiones he tenido que escuchar como las personas se impedían e
impedían a otras a  hacer algo, basándose en los prejuicios y las
creencias aprendidas que nos decían que para todo hay una edad. Pero
toda edad tiene su congruencia.  Un ejemplo de los tanto que he
escuchado, es el siguiente. ¡Después de los cuarenta no puedes ser
madre! Quien lo diría, cuando hace más de cien años atrás, la
esperanza de vida ni siquiera llegaba a los 40, dependiendo de las
condiciones en las que se encontraba el individuo.El mundo no solo ha
evolucionado tecnológicamente, también ha evolucionado en otros
aspectos, la esperanza de vida es mayor, lo mismo que la calidad sino
seguimos ignorando nuestros deberes y derechos, y las personas  somos
más consientes del propio potencial  ignorando los criterios ajenos
que se  empeñan  en clasificarnos según su propio juicio.Sin quitar el
merito a los profesionales que cuentan con los conocimientos
necesarios para brindarnos su ayuda.  Nadie conoce tanto nuestras
capacidades como nosotros mimos.Los prejuicios de la edad no son más
que un condicionante arcaico que limitaba a las personas. Debemos
reconocer a la edad la experiencia, el conocimiento adquirido con las
vivencias, las metas alcanzadas, el descaro y la seguridad  de haber
superado cualquier tipo de vicisitud.A partir de cualquier edad o
momento, lo que tenemos por delante se llama oportunidad.

martes, 27 de septiembre de 2016

RECETA DE LA VIDA



1kg de alegría en granos800g de cariño y amor en polvo
800g de fe inquebrantable en su jugo
500g de ilusión bien cortada en finas lonchas
500g de hojas de ambición y humildad
200g de gratitud en ramas

Estos ingredientes son los necesarios para que cada día de nuestra
vida la convirtamos en una maravillosa cocina,y así poder realizar
unas maravillosas comidas.En primer lugar para desayunar y siempre con
un buen vaso de leche o un buen café añadiremos unos granos de
alegría,seguidamente y en el zumo de naranja disolveremos 2 cucharadas
a partes iguales de cariño y amor.
Después en la hora del tentempié de media mañana podemos llevarnos
unas rodajas de fe inquebrantable en su jugo,junto con unas lonchas
finas de ilusión.Que maravilla,que bonito poder combinar los
ingredientes de nuestra vida en todas nuestras comidas.
Pues para la comida y la cena se pueden repetir todos ellos,incluso te
los puedes llevar cuando comas o cenes en un restaurante,y añadir
siempre unas hojas de ambición y humildad,y sobretodo en cada uno de
nuestros guisos,comidas,ensaladas o postres,podemos combinar nuestros
ingredientes.
A mi la verdad,que siempre me encanta poner en mis guisos mucha
gratitud,sin pasarse por que si no le da demasiado sabor,y lo combino
con alegría y amor,la verdad que salen unos platos exquisitos,y
siempre combinando los mismos ingredientes día a día y con mucha
imaginación,poniendo las dosis adecuadas,podremos hacer de nuestra
vida un muestrario de recetas de alta cocina.
¡¡Venga!!,anímate,ponte ha crear e inventar tus recetas diarias,todo
vale,y no a todos nos gusta igual,solo hay que tener imaginación y
personalidad para hacer de tus platos autenticas delicias.Bueno pues
ya sabemos el secreto de la comida de la vida solo hay que ponerse a
ello y cada día podremos ser el gran cheff de LA RECETA DE LA VIDA.

Fuente: amarlavida.blogspot

Amar la vida. (Reflexión de amor)



Un profesor fue invitado a dar una conferencia en una base militar, y
en el aeropuerto lo recibió un soldado llamado Ralph. Mientras se
encaminaban a recoger el equipaje, Ralph se separó del visitante en
tres ocasiones: primero para ayudar a una anciana con su maleta; luego
para cargar a dos pequeños a fin de que pudieran ver a Santa Claus, y
después para orientar a una persona. Cada vez regresaba con una
sonrisa en el rostro.
“¿Dónde aprendió a comportarse así?”, le preguntó el profesor. “En la
guerra”, contestó Ralph.
Entonces le contó su experiencia en Vietnam. Allá su misión había sido
limpiar campos minados.
Durante ese tiempo había visto cómo varios amigos suyos, uno tras
otro, encontraban una muerte prematura.
“Me acostumbré a vivir un paso a la vez”, explicó.
“Nunca sabía si el siguiente iba a ser el último; por eso tenía que
sacar el mayor provecho posible del momento que transcurría entre
alzar un pie y volver a apoyarlo en el suelo. Me parecía que cada paso
era toda una vida”.
Nadie puede saber lo que habrá de suceder mañana. Qué triste sería el
mundo si lo supiéramos. Toda la emoción de vivir se perdería, nuestra
vida sería como una película que ya vimos. Ninguna sorpresa, ninguna
emoción. Pienso que lo que se requiere es ver la vida como lo que es:
una gran aventura.
Al final, no importará quién ha acumulado más riqueza ni quién ha
llegado más lejos. Lo único que importará es quién lo disfrutó más.
Ama más quien más ha servido, porque aprecia su vida y la de los demás

LA VIDA: UN SOPLO DE AIRE FRESCO

Estamos acostumbrados a vernos en muchas dificultades durante toda
nuestra vida,todas ellas,vienen dadas de nuestros erróneos
pensamientos.Eso hace que la vida sea un torbellino de aire sin
control,el cual,arrasa todo cuanto pasa a su lado.
Pues bien yo quiero compartir con vosotros un soplo de aire fresco,tan
solo una leve brisa.La cual,muchas veces viene de repente y hace que
nuestro interior se acelere,nos da vida,nos hace renacer,hace que todo
cuanto hay a nuestro alrededor lo veamos de diferente modo.
Pues bien,eso nos pasa muchísimo a todos nosotros en nuestras vidas,y
con mas frecuencia de la que creemos,lo que pasa,que nos centramos mas
en el torbellino que nos ha pasado hace ya unos años,y ha ido mermando
nuestra vitalidad y nuestra energía haciendo que no veamos nunca los
soplos de aire fresco que nos ofrecen muchas veces.
Desde nuestros familiares,que siempre están ahí para renovarnos el
aire,los amigos que siempre nos dejan cada día un poco de ese
oxígeno,hasta una persona que ni si quiera sabias que existía y te da
una brisa de esperanza y alegría que nunca pensabas que llegaría.
Pues eso es lo que tenemos que ver más,hoy en día vivimos en una
sociedad la cual vive con prisas sin pararse un segundo y tomar un
poco de aire fresco.Siempre con el oxígeno cargado de deudas,mal estar
con la pareja,mal estar con tus padres,con los amigos,contigo mismo,y
sobretodo con el pesimismo de lo que ya hemos vivido.
¡¡BASTA YA!!.Salgamos al campo,a la playa,a un simple parque y paremos
cinco minutos cada día para recoger aire fresco y limpio.Seamos
humildes,pero vayamos a por todas,seamos gentiles y buenos con los
nuestros,pero sin dejar nuestra vida de lado,seamos felices y demos
gracias por cada día que nos levantamos y podamos disfrutar de
él,seamos inteligentes y tomemos la vida como un camino especial el
cual nos depara muchas y muy buenas cosas,y siempre que renovemos
nuestro oxígeno por una leve brisa de aire fresco,nuestra vida será
mucho más plena y llena de éxito.

Fuente. WWW.AMARLAVIDA.BLOGSPOT

EL MAR DE LA VIDA



La vida es como un mar, el cual puedes atravesar de mil maneras. Lo
bueno, es que puedes elegir la manera que quieras para atravesarlo, al
igual, que podemos elegir nuestra manera de vivir.
Puedes coger un velero, un transatlántico, un yate, un avión...Pero
claro, mucha gente se empeña en ir siempre nadando, y ahí está nuestro
error. Por que cuando vamos nadando, podemos llegar hasta un punto
pero, resulta agotador y prácticamente imposible llegar así a la otra
orilla.
Es igual que la vida, resulta agotadora cuando nos ahogamos por
nuestros miedos, rencores, tristezas, egos...Y no vemos mas allá que
un horizonte lejano, el cual es imposible de alcanzar.
Por eso creo que debemos dejar que el viento y los medios de los que
disponemos, nos guíen en nuestro objetivo. La vida, la podemos cruzar
mucho mejor con la ayuda de la esperanza, alegría, fe en nosotros
mismos y en lo que hacemos, y sobretodo y mas importante, en el amor a
todo lo que nos rodea y la gratitud por lo que ya tenemos.
Esos serian nuestros medios para que la vida, sean unas vacaciones en
un transatlántico, en un yate, en un velero o en un avión...Incluso,
si eres feliz, hasta en una canoa.
Lo importante, no es el medio por el que viajas en la vida, sino las
formas en que uno se toma la misma. Cuando viene una gran marea, una
tormenta, un arrecife de corales o hasta un gran maremoto,es cuando
hay que sacar fuerzas y creyendo en nosotros mismos, saldremos a flote
abrazándonos al salvavidas hasta que la inclemencia pase.
Eso es igual que en la vida, porque cuando vienen problemas hay que
mantenerse unidos, amarnos sin condición y agradecer que tenemos cosas
por las que seguir adelante.
Fuente:
WWW.AMARLAVIDA.BLOGSPOT

lunes, 26 de septiembre de 2016

Significado de Valores éticos


Los valores éticos son guías de comportamientos que regulan la
conducta de un individuo. En primer lugar, la ética es la rama de la
filosofía que estudia lo que es moral, realiza un análisis del sistema
moral para ser aplicado a nivel individual y social.

Los valores éticos más relevantes son: justicia, libertad,
responsabilidad, integridad, respeto, lealtad, honestidad, equidad,
entre otros. Los valores éticos se adquieren durante el desarrollo
individual de cada ser humano con experiencia en el entorno familiar,
social, escolar e inclusive medios de comunicación.

Los valores éticos demuestra la personalidad del individuo, una imagen
positiva o negativa de el propio, como consecuencia de su conducta, se
puede apreciar sus convicciones, sentimientos e intereses que posee,
por ejemplo: el individuo que lucha por la justicia, por la libertad,
considerados como valores positivos, refleja una persona justa, de lo
contrario, se observa un ser humano apático ante este valor y con
cierto apoyo ante las injusticias.

Los valores éticos permiten regular la conducta del individuo para
lograr el bienestar colectivo y una convivencia armoniosa y pacífica
en la sociedad.

Es de destacar, que los valores éticos pueden ser relativos en virtud
del punto de vista que posee cada persona, ya que por ejemplo para un
individuo llegar puntual al trabajo como sinónimo de responsabilidad
para otro no es ético o no es de relevancia, existen individuos que no
respetan los diferentes puntos de vista, para algunos es una actitud
no ética como para otros es sinónimo de defender su punto de vista y,
así como estos ejemplos pueden existir mucho.

Por otro lado, los valores éticos pueden ser absolutos, en virtud de
que es visto como un hábito o costumbre practicado por toda la
sociedad. Una vez con la aclaración de que consiste y que son los
valores éticos, el ser humano vive en un constante juicio ético, esto
es, razonar y determinar que acción, conducta o actitud es la más
acertada en un momento determinado, en función a las normas y valores
impuestos por la sociedad.

Cuando el individuo se encuentra frente a un juicio ético es
importante comprender el problema ético, buscar la mejor solución que
no perjudique a otros individuos y reflexionar porque fue la mejor
solución ante esa situación.

Etimológicamente, la palabra ética es de origen griego “ethos” que
significa “hábito o costumbre” y el sufijo “-ico” que expresa
“relativo a”.

Valores morales
Los valores éticos incluyen a los valores morales que son aquellos que
permiten diferenciar lo bueno de lo malo, lo justo e injusto de una
situación o circunstancia determinada. El juicio moral es el acto
mental que permite al individuo determinar su actitud con respecto a
lo que es correcto e incorrecto.

Valores humanos
Los valores humanos son las propiedades, cualidades o características
de un individuo. Los valores humanos son considerados universales y
dinámicos, en el cual se encuentran en todas las culturas y son pautas
que marcan las normas de una conducta coherente.

Valores estéticos
Los valores estéticos son la consideración de la apariencia de un
objeto, y las respuestas emocionales que provoca al observador. Los
juicios estéticos permiten al individuo calificar una obra de arte, a
través de los sentimientos.

sábado, 24 de septiembre de 2016

Definición de la tolerancia



    La tolerancia es uno de los valores humanos más respetados y
guarda relación con la aceptación de aquellas personas, situaciones o
cosas que se alejan de lo que cada persona posee o considera dentro de
sus creencias. Se trata de un término que proviene de la palabra en
latín “tolerare”, la que se traduce al español como “sostener”, o
bien, “soportar”.

    Podríamos definir la tolerancia como la aceptación de la
diversidad de opinión, social, étnica, cultural y religiosa. Es la
capacidad de saber escuchar y aceptar a los demás, valorando las
distintas formas de entender y posicionarse en la vida, siempre que no
atenten contra los derechos fundamentales de la persona...

    La tolerancia si es entendida como respeto y consideración hacia
la diferencia, como una disposición a admitir en los demás una manera
de ser y de obrar distinta a la propia, o como una actitud de
aceptación del legítimo pluralismo, es a todas luces una virtud de
enorme importancia.

Se considera generalmente la tolerancia como una virtud, pues tiende a
evitar los conflictos, "El espíritu de tolerancia es el arte de ser
feliz en compañía de otros.",

Historia de la Tolerancia



    La tolerancia empezó siendo tolerancia religiosa. La primera
redacción de tolerancia fue llevada a cabo con el Edicto de Milán. Sin
embargo éste junto con otros textos sobre tolerancia religiosa fueron
mal interpretados.

    Más tarde, J. Locke con su “Carta sobre la tolerancia” defendió
la libertad religiosa añadiendo que la religión era un peligro para la
paz y la convivencia social. También dijo que había que separar las
funciones religiosas (personales) de  las políticas.

    Voltaire escribió el “Tratado sobre la tolerancia”, que decía que
Dios no nos Había creado para odiarnos, sino para amarnos y
respetarnos.

    J. Stuart Mill, que escribió “Sobre la libertad”, dijo que la
tolerancia era el punto medio entre el despotismo y la anarqía.

      Estos tres autores son considerados como los pioneros en hacer
efectivos los principios de la tolerancia.

    La UNESCO en su 28º Conferencia General hizo pública una
declaración de principios sobre la tolerancia , que decía que ésta
debía estar presente también en la política y en la justicia, además
de en el individuo y sus semejantes.

Publicado por Karla Torres y Genesis Pastran

LOS SIETE PECADOS CAPITALES



Los Siete Pecados Capitales son una clasificación de los vicios
mencionados en las primeras enseñanzas del Cristianismo y Catolicismo
para educar e instruir a los seguidores sobre la moral. La Iglesia
católica romana divide los pecados en dos categorías principales:

Pecado venial aquellos que son relativamente menores y pueden ser
perdonados a través del sacramento. Pecado mortal los cuales, al ser
cometidos, destruyen la vida de gracia y crean la amenaza de
condenación eterna a menos que sean absueltos mediante el sacramento
de la penitencia, o siendo perdonados después de una perfecta
contrición por parte del penitente.

Comenzando a principios del siglo XIV, la popularidad de los Siete
Pecados Capitales como tema entre los artistas europeos de la época
eventualmente ayudó a integrarlos en muchas áreas de la cultura y
conciencia Cristiana a través del mundo.

En el libro “los Siete pecados Capitales” Fernando Savater explica:

Según el historiador inglés John Bossy, “los siete pecados capitales
son la expresión de la ética social y comunitaria con la cual el
cristianismo trató de contener la violencia y sanar a la conflictiva
sociedad medieval. Se utilizaron para sancionar los comportamientos
sociales agresivos y fueron, durante mucho tiempo —desde el siglo XIII
hasta el XVI—, el principal esquema de penitencia, contribuyendo en
modo determinante a la pacificación de la sociedad de entonces”.

En un principio, los pecados eran una advertencia respecto de cómo
administrar la propia conducta. No se trataba como en los diez
mandamientos de ofrecer las tablas de la ley, sino de mostrar los
peligros higiénicos que podrían asechar a las almas. Se trató de un
listado de advertencias sobre los peligros que puede acarrear la
desmesura frente a lo deseable. Hoy existe una versión más simplona de
esas advertencias, que son los libros de autoayuda, donde encuentras
unas fórmulas para no engordar y otras para ser feliz en tres
lecciones.

Según Bossy, la suerte de estos pecados terminó en la época moderna,
cuando la penitencia dejó de ser la forma de resolución de los
conflictos sociales para transformarse en algo psicológico e interior
a la conciencia de cada individuo. Fue el momento en que se
abandonaron los siete pecados capitales para pasar a los diez
mandamientos, que privilegiaban una relación vertical de cada
individuo respecto de Dios, en vez de la horizontal entre los hombres,
lo cual favorece la introspección personal. Bossy interpreta el paso
del Medioevo a la Edad Moderna como un pasaje de lo social a lo
individual.

Los pecados adquieren la categoría de capitales cuando originan otros
vicios. Santo Tomás describe: “Un vicio capital es aquel que tiene un
fin excesivamente deseable, de manera tal que en su deseo un hombre
comete muchos pecados, todos los cuales se dice son originados en
aquel vicio como su fuente principal…”.

Para el especialista en temas islámicos Ornar Abboud “el pecado no es
algo inamovible. Varía de acuerdo con el punto de vista del observador
y en referencia a la evolución del contexto social y cultural. La
mayoría de las acciones consideradas como pecado hace dos siglos —un
periodo ínfimo en la historia de la humanidad— hoy no tienen entidad
pecaminosa. En el Islam no tenemos la visión del pecado original, lo
que sí existen son definiciones sobre lo que es lícito o no. Llamamos
haram a aquellas cosas que están vedadas y halal a las que están
permitidas”.

LOS SIETE PECADOS CAPITALES SON:

SOBERBIA   
Ser soberbio es básicamente el deseo de ponerse por encima de los
demás. No es malo que un individuo tenga una buena opinión de sí mismo
—salvo que nos fastidie mucho con los relatos de sus hazañas, reales o
inventadas—, lo malo es que no admita que nadie en ningún campo se le
ponga por encima.

En general, podemos-admitir que tenemos cierto lugar en el ranking
humano, y que hay otros que son más prestigiosos. Pero los soberbios
no le dejan paso a nadie, ni toleran que alguien piense que puede
haber otro delante de él. Además sufren la sensación de que se está
haciendo poco en el mundo para reconocer su superioridad, pese a que
siempre va con él ese aire de “yo pertenezco a un estrato superior”.

GULA   
El pecado de la gula es el ansia inmoderada de comer, de beber, ese
afán de asimilarse Codo el universo por la vía digestiva. Es un pecado
que nos deja un poco perplejos en este mundo dietético en el que
estamos, choca tanto con la ética como con la estética y quizá tengan
más contra él los médicos que los propios clérigos.

A mi juicio, el problema de la gula es mucho más una cuestión de
higiene que de moral. Se trata de ver cómo administramos nuestros
placeres y cómo podemos comer para vivir satisfactoriamente. No
debemos obsesionarnos con vivir para comer, ni con vivir para evitar
las calorías. Lo peor de la gula hoy es que, mientras algunos tenemos
la suerte de poder comer y ayunar a nuestro albedrío, muchas personas
están privadas de lo imprescindible y no pueden siquiera alimentar a
sus hijos con lo mínimo necesario.

La gula se transforma en pecado cuando ofende el derecho y las
expectativas del otro al comer lo de los. demás, acaparar y dejarlo
con poco o nada. Olvidar eso sería el peor pecado o la peor forma de
gula en nuestro tiempo.

AVARICIA   
El pensador alemán Arthur Schopenhauer decía que el dinero es
felicidad abstracta. Ser feliz porque tienes una gran cuenta en el
banco, o porque guardas un gran saco con oro debajo de la cama, es
algo completamente imaginario.

Comprendo que alguien se sienta feliz porque tiene en sus brazos a una
mujer hermosa, en su mesa una comida estupenda y una botella de vino
incomparable. Yo no termino de entender a aquellos que se sienten
felices cuando ven un cheque, míe. sólo son unas palabras y algunos
números.

Lo que da fuerza al dinero es la necesidad de intercambio, que los
seres humanos requieran cosas unos de otros. Si no se deseara nada, no
habría tenido sentido inventar el vil metal. El dinero permite generar
un elemento que te da acceso a algo que tiene otro y tú quieres. De no
existir, las variantes serían pocas: el trueque, pero allí necesitas
que al otro le interese lo que tú le ofreces, o lisa y llanamente
sacárselo por la fuerza, robarle o estrangularlo.

Pero el avaro es el que convierte este acuerdo social en una
idolatría, sin entender la utilidad del dinero, que es absolutamente
virtual. Si se tratase de cupones que dijeran: “Vale por un
refrigerador” o “Vale por una merluza en salsa verde”, tendría un
interés más limitado, ya que si no te gusta la merluza no sabrás qué
hacer con ese vale. La gracia del dinero es que tiene un número y no
te dice qué puedes hacer con él.

IRA   
La ira, esa pasión arrebatadora, esa furia que de vez en cuando nos
convierte en auténticas fieras. En apariencia somos personas como las
demás, y ante un pequeño estímulo, o una provocación, nos
transformamos en auténticos salvajes.

El pecado de la ira es una cuestión de grados. Es un movimiento, una
reacción que puede indicar simplemente que estamos vivos y, por lo
tanto, nos revelamos contra injusticias, amenazas o abusos.

Cuando el movimiento instintivo pasional de la ira se despierta, nos
ciega, nos estupidiza y nos convierte en una especie de bestias
obcecadas. Ese exceso es perjudicial, pero yo creo que un punto de
cólera es necesario.

El escritor peruano Alfredo Bryce Echenique se reconoce admirador de
los iracundos “cuando se ponen rabiosos ante una situación infame por
la que callan los demás. El que se rebela, habla, grita y muchas veces
se juega el pellejo es muy distinto del que tiene un colerón porque le
sirvieron la carne fuera de punto”.

Como en muchas cosas de la vida, con los pecados primero hay que tener
la experiencia. Si eres una persona tan pacífica que nunca te has
enfadado, aunque te describan mucho la ira nunca la entenderás. Si
eres justo, puedes sentirte arrebatado por la ira. Ahí nos topamos con
el pecado.

LUJURIA   
La lujuria es uno de los pecados más escandalosos, y también de los
más tentadores. Gracias a ella, todos vinimos al mundo.

¿Pero cuál es realmente la esencia mala de la lujuria? ¿En qué sentido
quienes no tenemos especial afán puritano podemos encontrar algo
defectuoso en el exceso de la lujuria? Tengo claro que si hay algo
bueno en ella es precisamente el placer. Creo que el placer es bueno,
sano y recomendable. Si hay algo malo en la lujuria, será el daño que
podamos hacer a otros para conseguir goce, al abusar de ellos,
aprovecharnos de la inocencia de menores o de gente que por su
situación económica tiene que someterse.

No creo que, a pesar de lo que San Agustín y otros santos padres han
dicho de la sexualidad, hayamos venido a este mundo a sufrir. La
sexualidad no es un instrumento que debamos utilizar casi con
repugnancia sólo para la reproducción, sino que es una fuente de
relación humana y de contento en un mundo donde las alegrías no
abundan.

Pero, como en todos los casos a los que estamos refiriéndonos, el
límite de la lujuria desde el punto de vista humanista es causar daño
a otro. El sexo con niños es malo por el daño que se les hace. No es
malo disfrutar, pero sí es censurable causar mal a otro. Antes se
condenaba al placer, ahora al daño y el dolor que se producen. Es la
visión progresista de los pecados.

PEREZA   
La pereza es la falta de estímulo, de deseo, de voluntad para atender
a lo necesario e, incluso, para realizar actividades creativas o de
cualquier índole. Es una congelación de la voluntad, el abandono de
nuestra condición de seres activos y emprendedores.

Un viejo cuento narra cómo un padre luchaba contra la pereza de su
hijo pequeño, que no quería nunca madrugar. Un día llegó muy temprano
por la mañana, lo despertó y le dijo: “Mira, por haberme levantado
temprano he encontrado esta cartera llena de dinero en el camino”. El
niño, tapándose, le contestó: “Más madrugó el que la perdió”.

La pereza siempre encuentra excusas. Es perezoso quien renuncia a sus
deberes con la sociedad, con la ciudadanía, quien abandona su propia
formación cultural. La persona que nunca tiene tiempo para leer un
libro, para ver una película, para escuchar un concierto, para prestar
atención a una puesta de sol. Aquel que tiene pereza de convertirse en
más humano.

El escritor y humorista argentino Roberto Fontanarrosa tiene una
teoría: “La pereza ha sido el motor de las grandes conquistas del
progreso. El que inventó la rueda, por ejemplo, no quería empujar y
caminar más. Detrás de casi todos los elementos del confort supongo
que ha habido un perezoso astuto, pensando cómo hacer para trabajar
menos”.

ENVIDIA   
La envidia, definida como la tristeza ante el bien ajeno, ese no poder
soportar que al otro le vaya bien, ambicionar sus goces y posesiones,
es también desear que el otro no disfrute de lo que tiene.

¿Qué es lo que anhela el envidioso? En el fondo, no hace más que
contemplar el bien como algo inalcanzable. Las cosas son valiosas
cuando están en manos de otro. El deseo de despojar, de que el otro no
posea lo que tiene, está en la raíz del pecado de la envidia. Es un
pecado profundamente insolidario, que también tortura y maltrata al
propio pecador. Podemos aventurar que el envidioso es más desdichado
que malo.

El envidioso siembra la idea, ante quienes quieran escucharlo, de que
el otro no merece sus bienes. De esta actitud se desprenden la
mentira, la traición, la intriga y el oportunismo.

La envidia es muy curiosa porque tiene una larga y virtuosa tradición,
lo que parecería contradictorio con su calificación de pecado. Es la
virtud democrática por excelencia.

“Los Siete Pecados Capitales” de Fernando Fernández-Savater Martín
(San Sebastián, 21 de junio de 1947) es un filósofo, activista y
prolífico escritor español. Novelista y autor dramático, destaca en el
campo del ensayo y el artículo periodístico.

jueves, 22 de septiembre de 2016

Soberbia



La soberbia (del latín superbia) u orgullo (del francés orgueil) es un
sentimiento de valoración de uno mismo por encima de los demás.

Otros sinónimos son: altivez, altanería, arrogancia, vanidad etc. Como
antónimos pueden citarse los siguientes: humildad, modestia,
sencillez, etc. El principal matiz que las distingue está en que el
orgullo es disimulable, e incluso apreciado, cuando surge de causas
nobles o virtudes, mientras que a la soberbia se la concreta con el
deseo de ser preferido por otros, basándose en la satisfacción de la
propia vanidad, del yo o ego.
Significados negativos

En términos negativos la soberbia es una actitud orgullosa que
caracteriza a aquellas personas envanecidas de si mismas.
Genéricamente se la define como la sobrevaloración del yo respecto a
los otros, para superar, alcanzar o superponerse a un obstáculo o
situación, o bien en alcanzar una elevada desvalorización del
contexto. También se puede definir la soberbia como la creencia de que
todo lo que se posee es superior, que se es capaz de superar todo lo
que digan o hagan los demás, o de superar los prejuicios. La soberbia
incita a la persona a valorarse demasiado, enorgulleciéndose y
creyéndose capaz de hacer cualquier cosa por encima de los demás e
incluso de sus propias capacidades, de las circunstancias o mejor
dicho los contratiempos que se presenten. Esta idea deriva
directamente en que el soberbio ponga en detrimento a las demás
personas, debido a que piensa que sus capacidades o que su valor no se
equiparan al suyo, por lo que se lo considera arrogante.

Es considerado por la teología católica uno de los siete pecados capitales.

Entre las varias representaciones artísticas con que se ha
identificado la soberbia se encuentran el león, el caballo, el pavo
real, el murciélago, el color violeta y el espejo.

Su título y su concepción se relacionan con un pasaje del Eclesiastés:
vanitas vanitatum omnia vanitas (vanidad de vanidades, todo es
vanidad).

Manifestaciones del orgullo en grado de soberbia

    Rebeldía ante la obediencia.
    Autoritarismo al mandar.
    Envidia de los valores de otros.
    Crítica de los envidiados.
    La mayoría (de los momentos) del malhumor en la convivencia familiar.
    La mayoría de los enfados, incluyendo los contrarios a uno mismo.
    Nunca tienen dignidad y mucho menos aceptan sus errores.

Véase también

    Pecados capitales.
Fuente. Soberbia Wikipedia 2016.

Qué son Valores humanos


Se conoce como valores humanos al conjunto de características que
posee una persona u organización, los cuales determinan el
comportamiento e interacción con otros individuos y el medio ambiente.
Los valores son objeto de estudio de la Axiología.

Los valores humanos son valores morales que afectan la conducta de los
individuos. Los valores morales pueden ser considerados éticos y
sociales, que constituyen un conjunto de reglas establecidas para
lograr una convivencia saludable dentro de una sociedad. Asimismo,
existen los valores sociales y culturales determinados por una
sociedad y cultura, valores económicos, valores estéticos, entre
otros.

Para más información, consulte los artículos valores morales y valores éticos.

En referencia al individuo, se suele hablar de valores humanos.
Algunos de los valores humanos son: la honestidad, la responsabilidad,
el respeto, la tolerancia, el agradecimiento, el amor, la solidaridad,
la libertad, entre otros. En relación a este punto, se puede
determinar que los valores humanos cuentan con una serie de
características, como:

Jerarquía, hay valores que son considerados superiores y otros
inferiores, aunque no le resta la importancia de su práctica en el día
a día. En este sentido, se aprecia una escala de valores en el que
prevalece unos valores por encima de otros cuando existe un conflicto.
Polaridad, los valores se presentan en sentido positivo pero estos
conlleva un contravalor.
Dinamismo, los valores se transforman con las épocas, dan sentido a la
vida del ser humano y a la sociedad.
Integralidad, cada valor es una abstracción íntegra en sí mismo.
Es de resaltar, que existe una lista de valores humanos considerados
como valores universales, esto es, son comunes en distintas culturas,
por ejemplo: el respeto, la responsabilidad, la honradez, la
solidaridad, la verdad, el honor, la paz, etcétera. En contraposición,
existen valores humanos apreciados como relativos ya que no se
consideran comunes en todas las sociedades o que no son permanentes en
el tiempo.

Los valores humanos son importantes por su contribución en mejorar la
sociedad y aportar dignidad a la persona. A pesar de que hoy en día,
existe una crisis de valores, una pérdida de los mismos, que afecta a
la humanidad debido a la forma egoísta, odiosa, cruel y violenta que
se observa entre las relaciones sociales, por ejemplo: los jóvenes no
respetan a los mayores, delincuencia, prostitución, etcétera.

En razón de lo anterior, son esenciales los buenos ejemplos de la
sociedad a través del comportamiento, para lograr una convivencia
pacífica y llevadera entre los individuos.

lunes, 12 de septiembre de 2016

EL RESPETO


sábado, 10 de septiembre de 2016

Valores humanos



Si tu vida de valores morales está llena,
sabrás que con ellos, crecerás en dignidad,
tendrás buenas relaciones con la humanidad,
y vivirás por siempre una vida plena.

No vivas en la mentira, ni hagas uso de la violencia,
pues esto te degrada en lo personal,
no caviles que todo es banal
y mantén limpia tu conciencia.

Si eres justo serás un hombre noble,
de gran calidad humana,
por quien todo el mundo se ufana,
pues no tendrás personalidad doble.

Por eso en este poema de realidad
los 39 valores eternos te voy a listar,
para que presentes estén en tu pensar,
y tu vida sea plena de felicidad.

Autonomía, perdón, amistad,
caridad, dignidad, compañerismo,
compasión, comprensión, civismo,
Solidaridad, fe y equidad.

Gratitud, justicia, fidelidad,
Sinceridad, dominio de sí mismo,
Pertenencia, optimismo,
Obediencia y generosidad.

Madurez emocional, humildad,
Respeto, paciencia, sencillez,
Templanza, servicio, sensatez,
La vida y la honestidad.

Perseverancia e identidad,
Prudencia, sociabilidad y pudor,
Tolerancia, responsabilidad y amor.

jueves, 8 de septiembre de 2016

LA SINCERIDAD

A veces, atravesamos malas experiencias… ¿Alguna vez has sentido la
desilusión de descubrir la verdad?, ¿esa verdad que descubre un engaño
o una mentira?. El sentirnos defraudados provoca incomodidad, esta
experiencia nos lleva a procurar que nunca nos suceda lo mismo, y a
veces, nos impide volver a confiar en las personas, aún sin ser las
causantes de nuestra desilusión.

Sin embargo, como los demás valores, la sinceridad, no es algo que
debemos esperar de los demás, es un valor que debemos vivir para tener
amigos, para ser dignos de confianza….

La sinceridad es un valor que caracteriza a las personas por su
actitud congruente, que mantienen en todo momento, basada en la
veracidad de sus palabras y acciones.

Si queremos ser sinceros necesitamos decir siempre la verdad… esto que
parece tan sencillo, resulta una tarea muy dificultosa para algunas
personas. ¿cuántas veces utilizamos esas mentiras piadosas en
circunstancias que consideramos poco importantes?: como el decir que
estamos avanzados en el trabajo, cuando aún no hemos comenzado, por la
suposición de que es fácil y en cualquier momento podemos estar al
corriente. Obviamente, una pequeña mentira, llevará a otra más grande
y así sucesivamente… hasta que nos sorprenden.

Incluso, podemos inventar defectos o hacerlos más grandes en una
persona, o cuando ocultamos el enojo o la envidia que tenemos. Cuando,
con aires de ser “franco” o “sincero”, decimos con facilidad los
errores que comenten los demás, mostrando lo ineptos o limitados que
son.

No obstante, la palabra no constituye el límite único y visible de
este valor, también se evidencia en nuestras actitudes. Como, por
ejemplo, cuando aparentamos ser una persona que no somos, (normalmente
es según el propósito que se persiga: trabajo, amistad, negocios,
círculo social…), existe una tendencia a mostrar una personalidad
ficticia: inteligentes, simpáticos, educados, de buenas costumbres… En
este momento viene a nuestra mente el viejo refrán que dice: “dime de
que presumes… y te diré de que careces”; gran desilusión causa el
descubrir a la persona como era en la realidad, alguna vez hemos dicho
o escuchado: “no era como yo pensaba”, “creí que era diferente”, “si
fuese sincero, otra cosa sería”…

Esto nos demuestra que no sólo debemos decir la verdad para ser
sinceros, sino también actuar conforme a la verdad. Ello resulta un
requisito indispensable para la sinceridad.

Si nos mostramos tal cual somos en la realidad, nos hace congruentes
entre lo que decimos, hacemos y pensamos. De esta manera, logramos el
conocimiento y la aceptación de nuestras cualidades, pero también de
nuestras limitaciones: los demás nos quieren y aceptan como somos.

Puede ocurrir que faltemos a la Sinceridad por descuido, utilizando
las típicas frases “creo que quiso decir esto…”, “me pareció que con
su actitud lo que realmente pensaba era que …” ; tal vez y con buena
intención, opinamos sobre una persona o un acontecimiento sin conocer
los hechos. Para ser sincero, debemos ser responsables en lo que
decimos, evitando dar rienda suelta a la imaginación o haciendo
suposiciones.

Para ser sincero también se requiere “tacto”, esto no significa
encubrir la verdad o ser vagos al decir las cosas. Cuando debemos
decirle a una persona algo que particularmente puede incomodarla,
debemos ser conscientes que el propósito de nuestro comentario es
“ayudar”, no hacerlo por disgusto o porque “nos cae mal”; además
debemos buscar el momento y lugar adecuados para decírselo, esto
último garantiza que la persona nos escuchará y descubrirá nuestra
buena intención de ayudarle a mejorar.

De esta manera, la Sinceridad requiere valor, nunca se justificará el
dejar de decir las cosas para no perder una amistad o el buen concepto
que se tiene de nuestra persona. Si por ejemplo, es evidente que un
amigo trata mal a su esposa o a sus empleados, tenemos la obligación
de decírselo, señalando las faltas en las que incurre y el daño que
provoca, no solamente a las personas, sino a la buena convivencia que
debe haber.

Actuar de forma sincera implica decir la verdad siempre, en todo
momento, aunque le cueste, sin temor al qué dirán. Vernos sorprendidos
en la mentira es más vergonzoso.

Además, si somos sinceros aseguramos nuestras amistades, demostramos
ser honestos con los demás y con nosotros mismos, convirtiéndonos en
personas dignas de confianza por la veracidad que hay en nuestra
conducta y nuestras palabras. A medida que pasa el tiempo, esta norma
se debe convertir en una forma de vida, una manera de ser confiables
en todo lugar y circunstancia.