jueves, 23 de marzo de 2017

Parque Nacional Alejandro de Humboldt: Monumento vivo a la plenitud de la naturaleza



Ubicado en la zona montañosa Moa-Sagua-Baracoa, en  la zona oriental
de Cuba, este inmenso jardín natural que posee más de mil especies de
plantas que florecen, muchas de ellas endémicas y atesora una
descomunal belleza.
Es un monumento a toda la plenitud de la naturaleza y abarca los
bosques mejor conservados y los ríos más caudalosos del país.
La fauna es también variada y existen algunas especias endémicas que
se cuidan con especial celo.
En 1995 se creó este Parque Nacional, declarado por la UNESCO
Patrimonio Natural de la humanidad.
Con 69 000 ha, tiene un ecosistema marino de alto valor.
El tío Toa, el más caudaloso de Cuba, no el mayor que es el río Cauto,
y su afluente, el Jiguaní, nacen y corren a trabvés del Parque así
como otros como el Moa y el Naranjo quese caraterizan por la
transparencia de sus aguas.
El área de este hermoso Parque Nacional, presenta gran riqueza floral
y no solo constituye uno de los sitios de mayor diversidad vegetal de
nuestro archipiélago cubano, sino de todo el Caribe insular.
El Parque Nacional Alejandro de Humboldt, tiene indentificadas más de
1 000 especies de plantas con flores (la sexta parte del país
aproximadamente) y cerca de 145 helechos. Son endémicas, alrededor de
900, lo que equivale a la tercera parte de las reportadas para Cuba.
La fauna del lugar se caracteriza también por su abundancia,
diversidad y endemismo.
Este Parque Nacional, ubicado en la provincia de Guantánamo, es uno de
los más importantes del Caribe. Debe su nombre al científico alemán
Alejandro de Humboldt, quien recorrió la isla de Cuba en 1800 y 1801 y
realizó importantes aportes a la ciencia y a la cultura del país, por
lo que se le denomina El segundo Descubridor de Cuba.
En  las  montañas de este sin igual Parque Natural sus mesetas, ríos,
llanuras, bahías, arrecifes coralinos y cayos habitan numerosísimos
ejemplares endémicos de la flora y de la fauna. Posee uno de los
ecosistemas más variados, de una enorme belleza, y uno de los más
protegidos de Cuba. El grado de conservación del parque garantiza la
perpetuidad de los seres vivos y de los paisajes que aquí se
encuentran. Este lugar posee una de las mayores densidades vegetales,
y uno de los mayores endemismos del mundo. En él se encuentra el 2% de
las especies de flora de la Tierra.
Entre las especies faunísticas más destacadas por su carácter endémico
se encuentran el carpintero real (casi extinto), la cotorra, el catey,
el gavilán caguarero, el almiquí (mamífero insectívoro de hábitos
nocturnos), la dracena, la polimita, los cateyes, la jutía andaraz
(roedor). Además existen en este lugar tres de las especies de
vertebrados más pequeñas del mundo. La fauna marina reúne a manatíes,
anfibios (en especial una rana, la más pequeña del mundo, de 10
milímetros), reptiles y peces y a la Gambusia punctata, una de las
pocas especies endémicas de agua dulce de Cuba.
En cuanto a la flora, 16 de las 28 formas de vegetación de Cuba se
encuentran en esta región, destacándose los tres tipos de pluviselvas
cubanas.
El parque concentra además hermosos paisajes caracterizados por
montañas con bosques latifolios y pinares, y ríos, pozos y cascadas de
cristalinas aguas.

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